Marte ha crecido. Ha sido completamente terraformado —plantas y animales transgénicos— viven a orillas de los canales y mares tormentosos que han aparecido en los últimos años. Marte es ahora un planeta políticamente independiente. La mayoría de los Primeros Cien están muertos; los que quedan son los Mitos vivientes de los jóvenes marcianos…
Mientras tanto la Tierra ha crecido demasiado. Nacionalismo rabioso, recursos naturales escasos… demasiado gente… Marte parece un utopía burlona, un sueño inalcanzable, para vivir, para luchar, tal vez, para morir. Un libro hermoso, para vivirlo por dentro. Que sea cierto.